viernes, julio 07, 2006

Hacer las Cosas Bien


Interrumpo mi onda mundialera por un tema que me parece necesario comentar. Soy DC, y he sido concertacionista desde siempre. Sin embargo, no puedo dejar de hacer la crítica que voy a hacer ahora. Casa Chubi, casas de 9 mts. cuadrados como "soluciones habitacionales", casas copevas, calles con problemas, etc. Estos y otros son algunos de los miles de problemas que vemos cada cierto tiempo en las noticias, y que no hacen más que llenarnos de rabia y verguenza.
Sin duda en estos 16 años la Concertación ha logrado enormes avances en un país cuyo nível de vida era bastante más bajo hacia 1990 cuando terminó la dictadura militar. Hoy tenemos un país más democrático, más cerca del desarrollo, y que sigue dando pasos en la lucha contra la pobreza tanto material como espiritual. Pero sin embargo aparecen estas "manchas" que nos muestran que en este país muchas veces se nos olvida que haciendo las cosas mal no se solucionan los problemas de tantos chilenos que viven aquejados por la pobreza o por carencias que no pueden solucionar y a las cuales el mercado no otorga mucha salida. No pretendo darle un cheque en blanco al respecto a la derecha que tanto se dedica a criticar cuando ellos (si, ellos!!!) en 17 años no lo hicieron tampoco. Pero creo que es importante darnos cuenta de la necesidad de seriedad y verdadera voluntad de solucionar los problemas en aquellas personas y servicios (ya sean públicos o privados) que deben velar por el bien de las personas, especialmente de las que más lo necesitan. No más soluciones habitacionales chantas, no más proyectos mal hechos o no puestos en práctica. La gente en este país necesita que las cosas se hagan bien. Y eso es tarea de todos nosotros, empezando por el Estado y el gobierno, y quienes primero debemos recordarselo somos aquellos que lo apoyamos y que sabemos todo lo que se ha avanzado en estos 16 exitosos años. Solo así nuestro país podrá estar cada día mejor, y solo así la concertación seguirá siendo la que responda a la realidad y problemáticas de nuestro país.

3 comentarios:

Fco. Javier Gutiérrez. dijo...

cuando don Patricio Aylwin asumió la presidencia, en Chile casi no habia una politica de vivienda social, la que estaba era la heredada de Eduardo Frei Montalva.

En este tema la primera función del gobierno fue "dar casas a los sin casa"

Como no habia casi nada se crearon estas "viviendas progresivas" que en el fondo son las areas húmedas de cualquier vivienda (cocina y baño).

Ahora que gran parte del problema de vivienda está solucionado, la misión del gobierno seria que estas casas tuviesen una calidad minima y acorde a las necesidades de la familia.

Es cierto, estas "soluciones habitacionales" no son muy sociales y es el colmo a estas alturas se sigan entregando.

Espero que la ministra Poblete (me abstengo de hablar de Bachelet) cumpla con que estas son los rezagos de esa política habitacional.

saludos

Anónimo dijo...

Dejando de lado la parte política, de la que no sé mucho, toda la razón, george. Pero también parte el problema de una base más allá del gobierno, porque creo que son pocos los chilenos que no son mediocres, o que al menos luchan por no serlo. Si en el gobierno, cual sea su partido, hubieran personas con una visión verdaderamente humana, amplia, que mire a largo plazo y profundamente convencidos que trabajan por y para que no sólo un País salga adelante, sino que cada uno de sus ciudadanos, las cosas serían haarto diferentes.
salu2

Anónimo dijo...

dos cosas:

en chile no hubo "dictadura" técnicamente

basta de gobiernos paternalistas... en verdad, el tipo "pobre" tiene todas las facilidades del mundo en este país, sólo falta que vivan por el roto para que éste no haga tanto esfuerzo... PERO PEOR QUE AQUELLO, ESTOS GOBIERNOS CONCERTACIONISTAS, AÚN ABANDERADOS EN SUS DISCURSILLOS POR EL ESTRATO MÁS BAJO, DISEÑA POLÍTICAS INSÓLITAS, COMO ESAS PORQUERÍAS DE CASAS, DE LAS QUE CABE PREGUNTAR QUÉ TIPO DE CONTROL O SUPERVICIÓN PUDO TENER UN PROYECTO HABITACIONAL COMO ÉSE. LA DC, DISCÚLPAME, NO HA HECHO MÁS QUE ENQUISTARSE DE MANERA DECADENTE EN UNA COALUCIÓN QUE CARECE DE UNA RAZÓN PARA CONTINUAR. ESTO LA HA LLEVADO A COMPROMETERSE, ESTÚPIDAMENTE, EN EMPRESAS TAN INSÓLITAS COMO LOS ÚLTIMOS CUATRO GOBIERNOS.